Texto: Melissa Cortez*
No es noticia que uno de los juicios más controversiales en la historia del cine sea motivo de polémica, risa y hasta memes. El juicio público, entre Amber Heard y Johnny Depp, que es transmitido por YouTube, ha desatado un sin fin de teorías sobre quién es culpable. Hace unos años Heard tenía la batuta en el caso, ahora se convirtió en la villana desquiciada del cuento. La mayoría está con Depp y no faltan quienes quieren demostrar la teoría de que todos pueden ser víctimas de violencia, a pesar de que las cifras a nivel mundial digan que la mujer lo es mayoritariamente. Lo que se puede dar por sentado es la relación tóxica de los actores y la violencia que se infringieron y que está registrada en las pruebas que ambas partes presentaron.
Johnny Depp y Amber Heard —los protagonistas de este juicio, que si fuera un filme, sería más taquillero que “Piratas del Caribe” o “Aquaman”—, se conocieron en el rodaje de la película “Diario de un Seductor” en 2011. Un año después confirmaron su relación. Aquí empieza lo estrepitoso: se casan en el 2015, se separan en el 2016 y se divorcian en el 2017. Luego Heard denuncia a Depp por violencia física y psicológica y pide una orden de alejamiento. Sin embargo, esta acusación fue retirada luego de un acuerdo por siete millones de dólares.
Las consecuencias de ser famoso generalmente se centran en escándalos por abuso de drogas, violencia, promiscuidad, etc. En un artículo de la BBC se menciona que varios estudios apuntan a que los famosos viven menos y adquieren enfermedades con más frecuencia. Richard Epstein, profesor del Centro de Cáncer Kinghorn es uno de los investigadores citados en dicho artículo. Él comenta que «las presiones psicológicas y familiares de tener una vida pública exitosa conducen a tendencias autodestructivas a lo largo de sus vidas”.
La base de la demanda
2018 fue determinante para ambos actores. Heard escribe en el Washington Post un artículo contando su historia de maltratos por parte de su ex marido (sin mencionar su nombre). Como consecuencia de esto, Depp dice que su reputación es afectada y pierde papeles importantes en películas. En 2019 Johnnny Depp presentó una demanda por 50 millones de dólares en contra de Amber Heard por difamación. Ella, por su parte, lo contrademanda por la misma razón, pero por el doble de dinero: 100 millones de dólares.
En su artículo, Amber Heard mencionó al movimiento #metoo creado para denunciar la violencia sexual y acoso a mujeres y recibió el apoyo de grupos feministas alrededor del mundo, mientras Depp era fuertemente criticado por medios de comunicación. Este es el alcance e influencia que Heard obtuvo con sus declaraciones y fotografías como evidencias del malatrato del que fue víctima.
El juicio de la toxicidad
Cuando tienes los medios o estás dentro del medio es fácil visibilizar una problemática social que ocurre a diario en el mundo entero: la violencia de género y el impacto psicológico en los afectados. Lo cierto es que me resulta casi imposible tomar posturas, desde el feminismo y desde mi profresión como periodista, creo en la justicia y la verdad y me remitiré a los hechos.
El juicio por difamación de Depp contra Heard empezó el 11 de abril del 2022. Y ha llevado al estrado relevaciones muy significativas que concluyen en los severos daños psicológicos que tienen ambos actores, debido a traumas de la infancia y consumo de drogas.
Una de las testigos fue la hermana de Depp, quien habló de los maltratos que sufrían en la infancia proporcionados por su madre. Ella añadió que su hermano siempre se interponía para recibir los golpes. Y que a pesar de todos los traumas que esto pudo haber generado en él, Depp era “buen hombre y un buen padre”. Es importante vincular esta declaración con el testimonio de Johnny Depp. Él menciona que el abuso psicológico y emocional por parte de su progenitora causaron más daños que el maltrato físico. También recuerda a su padre huir de las discusiones con su madre y de los chantajes que ella le hacía para que no se separaran.
Por otro lado, Amber Heard, sus testigos y declaraciones se centran en el consumo de drogas por parte de Depp y lo violento que podría llegar a ser cuando esto ocurría. Heard habló de cosas espantosas que le hizo su entonces esposo, como la violación con una botella, golpes con puño en su cara y cabello arrancado. Ella tiene fotografías de su rostro golpeado. Sin embargo, existen contradicciones en sus declaraciones y muchas de ellas no puede comprobar.
Uno de los testimonios claves fue el de la psicóloga clínica Shannon J. Curry quien diagnosticó en dos sesiones a Heard con “Trastorno límite de la personalidad y trastorno histriónico de la personalidad» y afirmó que “los pacientes con estos trastornos pueden ser agresivos con sus parejas. Harán amenazas utilizando el sistema legal, amenazarán con solicitar una orden de restricción, alegarán abuso. Harán cualquier cosa para expresar la emoción de la ira”.
El juego de la culpabilidad
Existen pruebas que inculpan a ambos actores como seres violentos. De un lado están audios que comprueban que Amber gritaba a Depp, lo trataba mal y videos de supuestas infidelidades. La contraparte, en cambio, lo expone un video donde está furioso arremetiendo contra las repisas de su cocina o mensajes en donde hacía referencia al “cadáver podrido de Heard”. Incluso la hermana de Heard, Whitney, declaró haber visto a Depp golpear a su entonces esposa.
Se estima que el juicio termine a finales de mayo. Lo cierto es que gane quien gane, los protagonistas de esta película de la vida real han expuesto problemáticas de las que todavía no se hablan de manera prioritaria, como la importancia de la salud mental. Aunque ambos actores afirmaron que la relación al principio fue buena y que se sentían muy enamorados, parece que la toxicidad les pasó factura. Y ahora, en un juicio, los problemas mentales que cada uno sufre se han expuesto sin ningún contexto ni guía pertinente.
*Melissa Cortez es periodista, emprendedora, melomana y entregada dog lover. La conciencia social mantiene sus pies en la tierra. Su mantra es: escribir para no morir y crear para vivir.